27 Febrero 2013

El mayor de ellos, Marcel Bunout Cifuentes, relata que este proceso de cambio no estuvo exento de complicaciones debido, principalmente, a los resquemores de su padre de delegar y tomar riesgos, y a la posterior decisión de sus hijos, de buscar un socio y separar las líneas de negocios para potenciarlas.
Y es que la UTA fue la empresa que Bunout Espíndola levantó y acompañó por casi 50 años y por la que trabajó duramente, casi sin descanso. Pero si bien la forma de enfrentar el futuro de la compañía difería entre padre e hijo, los positivos resultados alcanzado en estos años demuestran que las cosas pueden ir bien encaminadas cuando hay una herencia de empuje y visión empresarial.
Conozca más sobre esta empresa de la voz de su gerente general, en la recién publicada revista de Cirpan, Somos Norte, N 8.